Cuantas veces hemos agarrado tal o cual guitarra, y sorprendentemente parece que ella nos agarra a nosotros. Nuestras manos se deslizan por ella como si fuese una extensión de la mano, y sin embargo otra persona agarra la misma guitarra y no le dice nada. ¿Porque ocurre esto?
La respuesta es muy sencilla. Entre otros factores de comodidad en un guitarra, está el radio de curvatura del mástil. Es muy importante saber cual es el que mas nos conviene, ya que ello redunda en que el instrumento nos brinde toda la comodidad para no tocar con “strees”. Este factor es muy importante e inside muchísimo en la ejecución del instrumento.
Como pueden observar, el contorno o perímetro es el que indican las flechas amarillas, sobre el cual se va a apoyar la mano en la ejecución del instrumento. Dependiendo del tamaño y la anatomía de nuestra mano, nos sentiremos mas cómodos con una u otra forma. Sobra decir que la variable del tipo de música que interpretamos, juega un papel decisivo para escoger lo que mas nos agrada.
Cuando probamos una guitarra en una tienda y no estamos seguros de como es nuestro mástil ideal, a veces nos llevamos a casa una guitarra convencidos de que es la ideal pero que a la larga nos ocasiona problemas y muchas veces ni siquiera nos damos cuenta del motivo de ello.
Si el mástil es demasiado delgado, sentiremos una falsa comodidad al principio, ya que llegamos mucho mas fácil a los trastes superiores, pero al estar tocando un rato nos damos cuenta que sentimos que la mano se agarrota o entumece. Esto es porque tenemos que flexionar exageradamente las articulaciones, es decir fuera de la posición natural, para pisar las notas.
Si por el contrario es demasiado grueso, también puede darnos una una falsa comodidad momentánea ya que la mano descansa mejor, pero a la larga también notamos que para hacer ejecuciones un poco complicadas nos resulta prácticamente imposible ya que tenemos que esforzarnos mas.
Es tan importante éste detalle, que los fabricantes nos ofrecen diferentes tipos de mástiles para que se adapte a todas las manos posibles. Estamos cansados de escuchar por ejemplo sobre los mástiles de Gibson uno el “Gordote” y otro el “Delgado” . Pero ahí no terminan las opciones.
Aquí tienen los perfiles de los mástiles mas comunes:
El perfil normal es el mas utilizado por los fabricantes ya que se adapta a la mayoría de las manos. Es el perfil “Todo terreno” o término medio.
El perfil grueso es para aquellos que tienen manos grandes.
Tomando como base el perfil normal, he trazado en amarillo el perfil del mástil en cuestión para que se aprecien a simple vista la diferencias.
El perfil fino, es para manos mas pequeñas.
Contorno en V, el perfil predilecto de Clapton. Este perfil busca una fusión de los dos anteriores. Tiene un espesor en el centro parecido al mástil de perfil grueso, pero con las caídas laterales como el mástil delgado
Perfil quilla de barco. Este perfil es similar al anterior pero para manos mas grandes.
Este mástil de perfil asimétrico, es muy controversial, ya que su comodidad depende bastante de algunos factores como tipo de música que interpretamos, tamaño de la mano etc. El perfil viene dado por la combinación en una mitad del perfil fino y en la otra del grueso. Es un mástil que gusta o no gusta de inmediato.
Este el es perfil mas cómodo que existe. pero tiene un GRAN inconveniente, y no es mas que es un mástil para una sola mano. Es muy difícil encontrar personas que se sientan bien con un mástil de otro guitarrista, ya que su elaboración es para características determinadas y especificas. En este tipo de mástil hay dos variables. Una es que el mástil va variando su forma dependiendo de la posición que ocupa la mano en ese momento. Esta es la versión diríamos anatómica. Por lo general es una combinación de todas las formas anteriores.
La otra versión es sacar un molde en un mástil preparado a tal fin con la forma exacta para un determinado guitarrista, o si la persona es hábil en el manejo de herramientas, pues va adaptando la superficie usando como guía su sentido del tacto.
Como determinar el perfil ideal para nuestra mano, pues Hay varias formas algunas muy sencillas y otras no tanto.
Lo mejor está en probar distintos mástiles durante cierto tiempo, para así ver si nos sentimos cómodos con alguno en particular, o por el contrario a medida que transcurre el tiempo nos vamos agobiando, comenzando inclusive a sentir molestias en el antebrazo, que a veces debido al abuso provocan tendinitis por el esfuerzo excesivo.
Si no tenemos la posibilidad de probar otras guitarras y estamos decididos a cambiar la que tenemos o sospechamos que nos causa problemas, pues podemos determinar mas o menos donde estamos cómodos viendo a que altura nos sentimos mejor, ya que los mástiles por lo general van de un perfil menor a un perfil mayor.
Si tenemos un mástil normal, que preferimos tocar a la altura de los primeros trastes, y se nos hace incómodo, difícil o hasta imposible desenvolvernos con soltura a la altura del 12, es evidente que necesitamos un mástil mas fino. Si por el contrario nos sentimos cómodos en los trastes superiores y notamos que tenemos que inclinar demasiado los dedos para llegar a los trastes iniciales, pues necesitamos un mástil mas grueso.
Luego está si la mano nos roza constantemente a lo largo del mástl en algún punto, debido a que tenemos mucho músculo en la palma o en la base de los dedos o un pliege del pulgar al índice demasiado corto, con lo que nos convendría un mástil tipo V o quilla de barco dependiendo del tamaño.
En cuanto a determinar el asimétrico, después de aprender a ver como se comporta o se adapta la mano, podemos determinar exactamente donde está lo que nos sobra o lo que nos falta para estar realmente cómodos.
Hay quienes usan masilla o plastilina para determinar exactamente donde tenemos que añadir o quitar. Si después de una sesión con la guitarra se ve que queda en el área impregnada a lo largo del mástil una tira de ésta masilla, pues eso es lo que nos falta en ese mástil para que nuestra mano esté cómoda. Si lo dejamos casi limpio, con algún que otro punto de masilla, estamos en nuestro mástil ideal. Ahora bien si por el contrario no dejamos ningún resto y sigue nuestro problema, pues habrá que ir por uno mas fino para hacer la prueba.
¿Como ponemos la masilla?. La colocamos en el mástil y que abarque un área de la mano. Lo ideal son cinco trastes, donde mejor nos sentimos. El hacerlo a todo lo largo del mástil no es recomendable ya que la prueba no seria tan fiel, y lo que queremos determinar es solamente nuestra anatomía.
Comenzamos a tocar todo lo que sabemos. AL principio es un poco incómodo y hay que ir retirando el exceso de masilla a medida que se acerca al borde del diapasón, pero mientras se avanza en la ejecución vemos como se va moldeando la plastilina a nuestra mano y al terminar tendremos una huella perfecta del perfil que necesitamos.
Una pequeña aclaración. Lo anteriormente expuesto es una gran ayuda para darnos una idea en la gran mayoría de las situaciones, pero no es una regla matemática que podemos aplicar a todas las situaciones. Pueden haber variables que dependiendo del estilo y la forma de tocar de cada quien, nos veamos en la necesidad de adecuar el método empleado.
Esto mismo es lo que hace un luthier con un cliente cuando construye un mástil ergonómico.
Si determinamos que tenemos un mástil muy grueso o muy fino podemos acudir a nuestro luthier de confianza para que nos lo adapte. En caso de que sea grueso, pues es muy sencillo rebajarlo a nuestro gusto. pero en el otro sentido ya no es tan sencillo. El luthier puede aumentar el diámetro pegando madera. Da mas trabajo pero no es imposible. Lo ideal es si se trata de un diapasón atornillado cambiarlo por uno nuevo. Pero hay que tener en cuenta un factor muy importante y es que en los dos casos puede cambiar el tono de la guitarra, y si somos listos, podemos inclusive aprovechar ésto para mejorarla.
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